martes, 9 de octubre de 2007

INQUIETANTE

Se preguntaba Rosa Montero en su columna de ayer, porqué ahora sí que nos escandaliza Birmania y antes no, y porqué ahora no nos escandaliza que Karzai (el presidente de Afganistán) ofrezca a los talibanes entrar en el Gobierno. Y termina su artículo con la frase: "qué inquietante".
A mí lo que me resulta inquietante es que alguien lance esas preguntas como si no estuviera clara su respuesta, como si no se quisiera creer en la respuesta que nos imaginamos, como si nos asustase nombrar la respuesta, como si tuviéramos miedo a conocer la verdad.
Bien, probemos. Lo haré también en forma de pregunta para no perturbar nuestra "paz intelectual" (oxímoron, contradicción entre las partes, donde hay un intelectual no hay ni puede haber paz): ¿será porque los intereses económico-políticos necesitan ahora que no se visualice el fracaso de la guerra "contra el mal" y para eso viene bien un nuevo escenario de terror en forma de dictadura militar?

jueves, 13 de septiembre de 2007

BIOCOMBUSTIBLES

Una vez que ya hemos demostrado que la desesperación arde (en forma de inmigrante rumano), ¿habría algún voluntario para comprobar si la mentira, la deslealtad, la traición, el robo, la injusticia, la desigualdad, la indolencia y la explotación son también buenos "biocombustibles"?

martes, 26 de junio de 2007

ARGUMENTOS EMBOSCADA

Dice el titular: "La pobreza obliga a trabajar a 218 millones de niños en el mundo. Los expertos aceptan el trabajo infantil, pero creen que debe ser compatible con la escuela". Y para ilustrar la noticia aparece la fotografía de una niña de Perú con un azadón en la mano más grande que ella.
Si quieren un ejemplo de hipocresía intelectual ahí lo tienen, y si quieren un ejemplo "glorioso" de argumento emboscada (aquel que se presenta bajo la disyuntiva de elegir entre lo malo y lo peor) ahí lo tienen también. ¿Quieren más ejemplos?, tomen nota:
- ¿será mejor que trabajen a qué pasen hambre, no?
- ¿será mejor que despidamos a unos cuantos a que cerremos la fábrica?
- ¿será mejor crear empleo, aunque sea precario, que tener unas cifras millonarias de parados?
- ¿será mejor privatizar las pensiones a que no podamos pagarlas en el futuro?
- ¿será mejor hipotecarnos a estar toda la vida de alquiler? (este no es un buen ejemplo, ahora la adquisición de un piso se ha convertido en un alquiler con derecho a compra)
- ¿será mejor pagar algo cuando voy al médico a que tenga que cerrar la Seguridad Social?
- ¿será mejor costear la educación de mis hijos a que se mezclen en la escuela pública con inmigrantes?
- ¿será mejor vivir renunciando a nuestros ideales que morir envueltos en ellos?
La pobreza obliga. A lo único que obliga la pobreza es a pasar hambre. La pobreza no es la causa, es el efecto de las desigualdades. Es la consecuencia lógica de un sistema basado en la explotación. Pero claro, ¿será mejor eso que volver a las cavernas? Pues mire no sé, a lo mejor deberíamos volver a las cavernas y empezar de nuevo.

EL CIELO

Lo que miles de millones de personas necesitan es que alguien les confirme que el cielo existe, porque de la palpable eternidad del infierno su propia no-vida es el más incuestionable notario.

lunes, 25 de junio de 2007

NO ME CREO NADA

He ido al psiquiatra, por recomendación del médico de cabecera, y le he contado mi caso:- Dígame, ¿qué le pasa?- Pues verá, resulta que últimamente no me creo nada de lo que me dicen. Desconfío de todo. Creo que la verdad está en lo que nos ocultan.- Póngame algún ejemplo, por favor.- Dicen que Bush exige a Israel una retirada inmediata de las ciudades palestinas, pero lo que realmente creo es que Bush le ha dicho a los palestinos que no enfaden más a Israel y que colaboren (ya sabe, como en las películas americanas, cuando dos policias interrogan a un detenido y uno de ellos se pone muy violento y le pega y le dice que le va a matar si no habla, y entonces el otro le hace salir fuera de la sala y se hace el amiguete del preso y le ofrece café y le dice que es mejor que hable si no quiere quedarse a solas con su compañero).Dicen que existe un eje del mal que nos persigue y del que hay que liberarse, pero lo que yo creo es que se está fabricando un nuevo enemigo para justificar esta Operación Triunfo del capitalismo globalizante.Creo que se inauguran parques temáticos como se inauguran conflictos temáticos, y todo con un único objetivo, luchar contra el verdadero terrorismo de nuestra militarización (perdón, quería decir civilización), el aburrimiento económico y social. El mundo se divide así entre Piolines y Silvestres, y hay que tomar partido si no quieres quedarte comiendo zanahorias transgénicas como Bugs Bunny.Y creo doctor, que la II Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento no se va a preocupar de cómo hacer viable el logro de la prolongación de la vida, sino de cómo hacerlo inviable. Quieren acabar con los viejos y sus insoportables gastos.¿Usted cree que es grave, doctor?- ¿Lo de los viejos?- No hombre, lo mío.- Yo diría que tiene los días contados.- Lo ve doctor, usted me está diciendo que me muero y yo en cambio creo que lo que realmente me quiere decir es que me tome un lexatín (desayuno, comida y cena) y que pronto notaré la mejoría.- Pues eso.- Pues adiós.

LA CONSTITUCIÓN

Al comienzo de la película “Los hermanos Marx en el Oeste”, Groucho, que quiere comprar un billete de tren, le dice al taquillero mientras le suelta unas monedas: “no lo cuente que es peor”. Pero el taquillero lo cuenta y le reclama lo que falta, y entonces Groucho contesta: “le dije que no lo contara”.Pues bien, con la Constitución se debería hacer lo mismo (si no es lo que se hace ya). Se tendrían que repartir ejemplares en los colegios, advirtiendo encarecidamente a los niños que por favor no la lean, y así impedir conversaciones marxianas:- pero profe, éste artículo no se cumple- Manolito, ya te dije que no la leyeras.¿Por qué preocupan tanto los cambios en la Constitución si ya nadie quiere convertirla en el programa político de su partido?Yo propongo un cambio, para adecuarla a los nuevos tiempos, en los artículos donde dice “todos los españoles tienen derecho a una vivienda digna, educación, sanidad y trabajo”, añadir por delante la partícula “no”.Posdata: ¿Qué tiene más legitimidad democrática, un 25% de votos en Venezuela o un 50% en Estados Unidos (a pesar de la utilización del terror, la guerra y el sistema electoral como mecanismos de ocupación del poder) o un 91% en Kazajistán?

LA REVOLUCIÓN

Hay veces que la realidad se nos muestra de manera paradójica. Una de las vías con más potencia reveladora es el lenguaje publicitario. Pongamos dos ejemplos:- Una compañía de telefonía nos ofrece llamar por un céntimo de euro al número que nosotros elijamos y “para toda la vida”. Cuando ya nada es para toda la vida (ni amor, ni trabajo, ni electrodomésticos, ni relaciones) la publicidad recrea el mito, juega con él. Supongo que con el tiempo se podrá cambiar de número (o es ahí donde está el truco), porque si no ¿qué número/persona elegir para toda la vida?- Una entidad financiera nos ofrece su nueva hipoteca (a pagar durante 40 años) y la llama “Revolución”.La revolución es ahora traspasar a los herederos no sólo el bien sino también sus deudas. ¡Viva la revolución! (pero que viva cerca, que decía aquel revolucionario poco convencido y harto de caminar). La publicidad llama revolución a lo que es claramente una contrarrevolución. ¿Cómo hacer una revolución ahogados entre hipotecas, créditos personales y contratos precarios? ¿Cómo hacer una revolución, cómo diseñar un horizonte de esperanza si el peso de nuestras pequeñas miserias nos obliga a mirar la punta de nuestros zapatos?Llegará un día en que alguien llamará revolución a volver a pintar dibujos en las paredes de nuestras hipotecadas cuevas.Ahora nos enteramos de que España ha descendido 6 puestos en el Índice de la Competitividad. Entre los factores que lo explican nos dicen que está “el deterioro en la penetración relativa de la telefonía móvil”. En el primer puesto, y desde hace 3 años, está Finlandia. Y del tercero al décimo están el resto de los países nórdicos.Según nos habían dicho la competitividad se veía perjudicada con impuestos elevados, altas prestaciones sociales y un mercado laboral estable, pero esta es precisamente la bandera de los países más competitivos.Vemos como el lenguaje político, al igual que el publicitario (del que es alumno aventajado), utiliza la paradoja como forma de ocultar la realidad.Yo, por lo pronto, y hasta que se aclare definitivamente qué es la competitividad y cómo medirla, utilizaré más mi teléfono móvil (para aumentar su penetración relativa) y voy a elegir como número “para toda la vida” el del banco hipotecario. Me apunto a la Revolución.

PRIVATIZACIÓN

No es sólo la economía lo que se está privatizando. Al mismo tiempo, y puesto que hemos aceptado la subsunción de toda racionalidad al mandato implacable de la ideología economicista liberal, es la vida misma, sus ritmos, sus estructuras espacio-temporales la que se ve sometida a dicha privatización.Esta dinámica, que no podemos decir que sea radicalmente nueva (está en los genes del sistema capitalista), alcanza ahora grandes cotas de visibilidad.La esfera de lo público, de lo común (de aquello que hace comunidad) está siendo sustituida por una red de intereses diversos y diversificados. Pero una comunidad es una multiplicación, y lo que hoy se nos vende como sociedad es tan sólo una suma de preferencias aisladas. No puede ser de otra manera si todo es mediado a través del consumo (consumir es un acto individual, por mucho que nos quiera convencer de lo contrario la publicidad).Hemos pasado de la construcción colectiva de nuestra subjetividad, a una construcción subjetiva de lo colectivo. No es al "nosotros" a quien se dirige la publicidad, es al "yo" indefenso y débil, a quien intimida su mensaje.Pondré unos ejemplos de esa exposición obscena y desvergonzada de la privacidad en los espacios que un día fueron comunes:- Los programas de telerealidad, en donde gente anónima o famosilla, está dispuesta a ser observada día y noche. Y no para mostrarnos habilidades o valores factibles de ser utilizados por el resto de la sociedad, sino para dejarnos ver su intimidad (aunque esté mediatizada). Pero además, esta morbosidad es de doble dirección, puesto que quien observa también es observado. No es mirar en secreto por una rendija, es participar del espectáculo y comentarlo públicamente sin consciencia de cometer ninguna inmoralidad.- Ya es imposible ir en un transporte público (de momento nos han dejado el metro, supongo que por poco tiempo) sin que alguien invada nuestra intimidad y nos haga partícipes de una conversación privada de la que no nos podemos escapar. El teléfono móvil agujerea el tejido social y nos acerca al otro dentro de una red virtual, pero nos aleja del que tenemos a nuestro alrededor (y no soy un luddita).- La moda actual consiste en exteriorizar, hacer visible la ropa interior (el efecto superman). No es necesario romper ninguna barrera para acceder a lo privado, lo privado se nos pone delante de los ojos, nos invita, nos llama, nos convoca con su indisimulada presencia.- Por último, los tatuajes. Donde ya no es posible mostrarnos más, donde la carne no puede hablar más descaradamente, allí se pone una marca, una señal. Nos convertimos en carteles publicitarios, nos anunciamos, nuestro propio cuerpo convertido en soporte y mercancía al mismo tiempo. Nos significamos señalándonos. Por medio del tatuaje o del percing, privatizamos nuestra piel y dirigimos la mirada del otro hacia nuestra intimidad publicitada.

GLOBALIZACIÓN

"Socialismo o barbarie". Y si esto nos parece ahora excesivo, digamos: "Democracia o barbarie", "Justicia social o barbarie", "Cultura o barbarie".En medio del horror y la sangre, pensemos. O primerizamos el tercer mundo o el primer mundo se terciarizará.Por un mundo mejor, por otro mundo, ¡luchemos! No consintamos que sea la barbarie lo que se globalice.

EL CONSUMO

CIUDADANO: palabra en desuso (ver consumidor)
CONSUMIDOR: sujeto que consume
existen dos clases de consumidores
el conSUMADO consumidor
distintivo de los países ricos
y el conSUMIDO consumidor (o restado consumidor
o cero a la izquierda
o fiesta en domingo)
característico de los países pobres
y de las áreas marginales y periféricas
de los polos de desarrollo urbanos
CONSUMO: concepto espiral y endocéntrico
referido a la acción cotidiana
de consumir cotidianamente
(¿consumimos porque somos consumidores? ¿o somos consumidores porque consumimos?)
el mundo gira gira gira gira gira gira
alrededor del consumo
sólo que los ricos consumen riqueza
y los pobres
deforestación contaminación sobreexplotación y miseria

DEBERÍAMOS

Deberíamos olvidar la uniformidad, la unicidad y empezar a reconocer la diversidad, las diferencias, la multitud (T. Negri).Deberíamos utilizar un concepto que no se cierre, que se abra. Un concepto en acción, no finalizado. Un nombre sin propiedad, un nombre que no se apropie de su definición. Todo lo que diría el diccionario sobre él sería algo así: "en construcción, esperamos tus comentarios".Deberíamos abandonar el término universo y sustituirlo por el de multiverso.Decía B.Brecht: "Malos tiempos, cuando hay que explicar lo obvio". Pues, porque corren malos tiempos hay que volver a explicar lo que creíamos sabido. Y sabemos que no hay verdades únicas, pero sí hay mentiras evidentes (V. Montalbán): el progreso, la modernidad, el desarrollo, la ciencia (sin con-ciencia), la democracia, la justicia social.Necesitamos apoyarnos en una nueva pedagogía de los silencios, una pedagogía de la lentidez (lentitud/rapidez). Una pedagogía que no nos vomite certezas sino que nos provoque preguntas (el por qué más importante es el que nunca nos hacemos).Necesitamos priorizar las consecuencias, para que sea el último quien nos marque el ritmo (subcomandante Marcos).Necesitamos construir un egoísmo comunitario (nada sin el otro).Necesitamos reflexionar sobre lo que ya no está, sobre lo que aún no tenemos (las ausencias/emergencias de las que nos habla Boaventura S. Santos).

EL RADICAL

Zapatero es un peligroso radical. Y para demostrarlo, veamos sus últimas acciones de gobierno:- ha nacionalizado la banca- ha subido los impuestos a las rentas altas, como paso previo a una masiva redistribución de la riqueza- ha permitido las uniones matrimoniales entre humanos y cualquier animal (no hace falta que sea doméstico, el animal)- ha diseñado un plan a medio plazo para la disolución de la educación y la sanidad privadas- ha introducido un ambicioso proyecto de participación ciudadana, que posibilita la toma de decisiones de una manera asamblearia y democrática- ha incentivado la radiotelevisión pública, ha barrido toda la basura de la programación (incluida la publicidad), ha creado espacios de debate e información pedagógica (en lo que ha definido como una "apuesta social de futuro")- ha negociado con los separatistas, los terroristas y los comunistas para convertir a España en un desmembrado país, tan insignificante como el patio de mi casa (que es particular)- ha liderado un movimiento de ayuda humanitaria a escala mundial, que en los próximo años (cinco, es la estimación) hará disminuir considerablemente la pobreza y las desigualdades del planeta (su nombre suena como el próximo Nobel de la paz)- ha intervenido el suelo, dándole una titularidad pública, a partir de la cual le ha permitido regular el mercado inmobiliario y crear una extensa oferta de viviendas en alquilerSí, sí, ya se lo que está pensando, que nada de esto es cierto. Pero eso no es lo más importante, porque si recuerda, tan grave es pecar por obra que pecar de pensamiento. Y Zapatero es en eso en lo que está pensando, eso es exactamente lo que quiere hacer, si le dejamos.Zapatero desea a la mujer del prójimo, desea a su mujer, píenselo así.

LA IGNORANCIA

Disculpen la ignorancia pero hay algo que me inquieta y no entiendo:Si Teodoro Obiang tiene petróleo (quiero decir su país) y él no se lo gasta en su pueblo sino que lo acumula en sus bolsillos, y toda la opinión pública dice que eso está mal, muy mal. Y si Hugo Chávez también tiene petróleo pero se lo gasta en hacer obras públicas y programas sociales, y todos los medios de comunicación dicen que esas políticas populistas están también muy mal. ¿Dónde está el bien? ¿Cómo reconocerlo? ¿Denme una pista, por favor, díganme por qué letra empieza?Reciban un cordial saludo y perdonen las molestias. Muchas gracias.

HIPERACTIVIDAD

Nuestro diccionario define economía como: ciencia que estudia los métodos más eficaces para satisfacer las necesidades humanas materiales, mediante el empleo de bienes escasos. ¿Realmente esto es así? La economía, y más desde que perdió su apellido (política), no se ha preocupado por satisfacer las necesidades y menos aún desde el empleo de bienes escasos. Es decir, se comporta como si los recursos fuesen ilimitados (en términos existenciales) pero en cambio crea/gestiona la escasez para poder manejar el precio de las cosas. Un sinónimo de economizar es ahorrar, pero nuestras sociedades no están basadas ya en el ahorro y la producción sino en el consumo y el despilfarro de servicios y bienes inmateriales. Estamos inmersos en sociedades obscenas, cínicas, pornográficas. Como en la pornografía estamos interesados en un tiempo acelerado y presente, enmarcados en un corto espacio (en un primer plano) y dentro de una acción de consumo (sexual en el caso de la pornografía) que no requiere, que desprecia el argumento biográfico que justifica y explica nuestros relatos. Hemos abandonado la erótica de la utopía por el pragmatismo mortecino de lo posible. Despreciamos la calidad (por eso el éxito actual de la copia), la profesionalidad, el esfuerzo, porque todo eso no hace sino ralentizar el sistema (el menos es más de antes). Vivimos bajo una dictadura de la cantidad, inflacionista (cuanto más mejor, aunque sea peor). Patologías individuales como la anorexia, la bulimia, la esquizofrenia, la drogadicción tienen un claro precedente en la visión deformada que del mundo estamos construyendo (nos incitan a consumir al tiempo que nos transmiten mala conciencia por ello, nos hacen creer que está al alcance de cualquiera ser inmortal). Todos queremos ser otro, estar en otro lugar. Insatisfacción y consumo están íntimamente ligados. Pero aunque sea inconscientemente, todos en algún momento sospechamos que vivimos en Mátrix. Fijémonos por ejemplo en la hiperactividad (de la que se escapan cada vez menos niños). Patologizamos esos comportamientos sin darnos cuenta que estamos rodeados por ellos en la sociedad. Las empresas son hiperactivas, diversifican sus actividades en diferentes sectores productivos o de inversión. Los ciudadanos son hiperactivos, somos consumidores y productores (al mismo tiempo) cuando echamos gasolina, cuando vamos al supermercado, cuando entramos en Internet. Las máquinas son hiperactivas, los televisores valen cada vez para más cosas, los frigoríficos llevan incorporado un televisor y llevarán un ordenador que se conectará autónomamente a la red, los teléfonos no sólo sirven ya para hablar, etc. El lenguaje es hiperactivo, el ocio es hiperactivo, la vida es hiperactiva, incluso la muerte es hiperactiva.

domingo, 24 de junio de 2007

WATERGETA

En 1972 nació en EE.UU. el escándalo del caso Watergate. De lo que se trataba, en principio, era de la detención de un grupo de personas que habían entrado en el hotel Watergate de Washington para espiar al partido Demócrata. Posteriormente, y cuando se demostró la implicación de funcionarios del gobierno e incluso del propio presidente Nixon, se produjo la renuncia de éste a su cargo.Si traducimos el hecho, ¿qué es lo que tenemos? Pues una utilización partidista de los aparatos e instituciones del Estado como instrumento ilegal de lucha política.¿Y si castizamos los datos con qué nos encontramos? Probemos: estamos en 2004 (marzo), en España, en Madrid, calle Génova y Ministerio del Interior, Aznar/Rajoy/Aceves, la Cope/El Mundo. De nuevo una utilización partidista de los aparatos e instituciones del Estado (gobierno, embajadas, medios de comunicación públicos) además de medios de comunicación privados, víctimas del terrorismo, sentimientos ciudadanos y sobre todo una bochornosa "utilización de los tiempos" para influir sobre las voluntades políticas que habría que expresar tres días después.Diferencias: a Nixon le echó la explosión del caso, Aznar ya había tomado la decisión de irse antes de la explosión. A Nixon le sustituyó su vicepresidente Gerald Ford (que le otorgó un perdón incondicional), a Aznar no pudo sustituirle Mariano Rajoy (de esa herida mal cerrada proceden los gritos de ahora). Nixon dejó de aparecer en público, Aznar está todo el día en la calle (como cuando éramos pequeños, le tienen que llamar para que suba a comer). Allí, unos periodistas tenaces, dignos representantes de lo que significa una verdadera libertad de expresión e información, tumbaron al mismísimo presidente del gobierno; aquí, unos "entrevistadores a sueldo" compraron declaraciones de imputados judicialmente para sostener teorías conspirativas que permitiesen excavar túneles de escapatoria a las actuaciones indignas de un gobierno.Sólo en una cosa estoy de acuerdo con "ellos", esto merece una rebelión cívica. Y ahora si me disculpan, tengo que ir a vomitar.